La última reunión del consejo de administración de la empresa pública Móstoles Desarrollo finalizó con bronca entre los consejeros designados de los grupos de la oposición y la concejala de Presidencia y Empleo, Rebeca Prieto.

La crispación resultó de tal calado que varios de los representantes de la oposición plantearon querellarse contra la concejala a la que acusaron de falso testimonio y de calumniar.

Todo se precipitó en el turno de ruegos y preguntas a cuenta de la solicitud de información del proceso de selección llevado a cabo en la contratación de la pareja de un exedil del PSOE local.

Rebeca Prieto acusó a los representantes políticos de estar ejerciendo “mobbing” contra la empleada, por haber hecho pública su situación contractual.

Prieto afirmó que la trabajadora la había solicitado amparo, dada la repercusión que había tenido el proceso de selección.