Con motivo de las obras de soterramiento de la A-5, que se prolongarán durante los próximos dos años, el Ayuntamiento de Móstoles ha puesto en marcha un plan de movilidad destinado a minimizar el impacto en los desplazamientos. Las principales medidas se centran en la reorganización de las líneas de autobuses interurbanos y el refuerzo de alternativas de transporte público.
Seis líneas de autobús, las 521, 522, 523, 524, 525 y 534, modificarán su trayecto, trasladando su cabecera de Príncipe Pío a Cuatro Vientos. Desde allí, los usuarios podrán conectar con la línea 10 de Metro o la C-5 de Cercanías. Además, Metro de Madrid reforzará su operativa en la zona, mientras que Cercanías incrementará la frecuencia de trenes en la C-5 durante las horas punta.
La Concejalía de Movilidad ha solicitado al Consorcio Regional de Transportes que refuerce la conexión de autobuses urbanos con las estaciones de Cercanías Móstoles El Soto y Móstoles Central, y ha promovido que los servicios de las líneas 521 y 523 incluyan paradas en estas estaciones.
En lo relativo al uso de vehículos privados, el plan de movilidad propone itinerarios alternativos que incluyen el uso de vías como la M-40, la M-50 y la R-5, para evitar la zona de obras. También se reforzará la señalización en puntos clave, como el enlace A-5/M-40, para facilitar la elección de rutas más eficientes.
La concejal de Movilidad, Transportes y Consumo, Raquel Manjavacas, subrayó la importancia del transporte público en este plan y reafirmó la intención de insistir al Ministerio en extender la gratuidad de la R-5 al vehículo privado durante el periodo de obras.
El Ayuntamiento de Móstoles insta a los ciudadanos a priorizar el transporte público frente al vehículo privado para garantizar una movilidad más ágil y sostenible.